Hacía demasiado tiempo que no venía al blog a despotricar y enfadarme con el mundo y creo que ha llegado el momento. Veréis, mantengo una relación de amor-odio con el shojo puesto que todas las historias me parecen las mismas con un par de matices de diferencia, pero siempre me llaman la atención. Lo que se denomina masoquista, vamos. Siempre que sale un anime de este género me convenzo a mí misma de que no lo voy a ver porque es una trama repetida hasta la saciedad que tiene un 99% de posibilidades de no aportarme nada nuevo ni crucial en mi vida. Sin embargo, termino cayendo en la tentación por culpa de toda esa gente que lo ve y le encanta. Y de verdad, debería aprender a ignorar eso.
Y os preguntaréis, ¿a qué viene esto de repente? Y yo os respondo: Orange. Decían que era drama en estado puro y precioso y a mi me chifla el drama. Es cierto que las recomendaciones venían básicamente del manga, pero mi pereza suprema me invitó a ver el anime. El caso es que yo empecé con altas expectativas y me encontré una historia bonita, sí. Pero mi problema es Naho, la protagonista. De verdad, no sé qué narices pasa con las chicas de shojo que las hacen todas cortadas por el mismo patrón y las acabo odiando porque no puedo con ellas. He aquí el motivo de esta entrada.
¿Por qué me desagradan tanto?
- Suelen ser chicas normales, casi tirando a mediocres, que no destacan en nada. Por azares del destino, el chico guapo (en ocasiones el nuevo alumno de la clase o viceversa, la chica es la nueva), se fija en ellas sin motivo aparente, solo por el hecho de que es una historia de amor y tiene que ocurrir. A veces ni siquiera hacen ese enamoramiento coherente.
- La mayoría están cortadas por el mismo patrón. Son tímidas, buenas personas, piensan antes en los demás que en sí mismas, son vergonzosas, tienden a verse afectadas por lo que ocurre a su alrededor y por el qué dirán. En definitiva, se tornan insoportables, pavas, tontas e insulsas, sin sangre en las venas, dejándose llevar de un lado a otro por las circunstancias e incapaces de decir no a situaciones en las que no se sienten cómodas.
- Son incapaces de mantener una actitud serena delante del chico que les gusta. Enseguida de ponen nerviosas, balbucean y se comportan como unas completas idiotas, como si su capacidad de raciocinio se viera interrumpida.
- Hacen todo por el chico en cuestión, desde la comida para el colegio, hasta ayudarle con los deberes y a estudiar. Ni siquiera se plantean si deberían o no hacerlo, simplemente lo hacen y punto, porque viven por y para la otra persona y están deseosas de que se fije en ellas.
- Lloran, lloran, lloran, lloran por todo. De verdad, no he visto nunca tantas lágrimas como en un shojo. Se convierten en recipientes de cristal que se rompen si los tocas. Cualquier cosa hiere sus sentimientos. ¿Cómo pueden portarse así de mal con ellas si se desviven por su amor? Si es que, el mundo está lleno de desconsiderados...
- Se convierten en unas personas celosas e inseguras, sin estar necesariamente en una relación. Cualquier chica que se acerque a su pareja, son objeto de celos, aunque no tengan motivo. Es más, esa tercera chica suele ser la excusa perfecta dentro del anime para crear un conflicto y que el chico se vea obligado o bien a declarar o bien a afianzar el amor que sienten por la protagonista y que así la pobre deje de sufrir.
- Viven por y para su amor. Una vez aparece el chico en sus vidas, tienden a dejar el resto de obligaciones en segundo plano. Solo tienen pensamientos para él y no lo sacan de su cabeza 24/7.
- La relación avanza muy despacio. MUY despacio. Hasta el punto en que a veces se acaba la serie y no se han dado ni un solo beso. Y eso me desespera. Entiendo que quieran tomárselo con calma, pero a veces es excesivo y lo único que consiguen es enfadarme. De verdad, no pillo que se pongan dale que te pego el primer día, pero que lleven un par de meses juntos y ni siquiera sean capaces de abrazarse me parece exagerado. Incluso, lo que peor llevo es que la serie esté plagada de oportunidades de beso y nunca culminen. ARG.
- Solo el amor puede hacerlas feliz. No importa los problemas a los que se enfrenten, su novio es su todo y si está a su lado, pueden luchar contra viento y marea.
Y esto es, a grandes rasgos, lo que opino de este género y de sus protagonistas. Sí, sé que existen animes como Lovely Complex o Gekkan Shojo Nozaki-kun que se escapan de este concepto y son geniales, pero los "shojos propiamente dichos", de estilo colegial y dramático, a menudo están cortados por este patrón. ¿Qué opináis?
Hola
ResponderEliminar*Aplausos* Creo que debido a tanta repetición es que he dejado de lado un poco el genero (aunque No abandono) Pero que vivan las excepciones!
Besos