"En el camino a Xanadú", Verónica Pazos

Título: En el camino a Xanadú

Autora: Verónica Pazos

Editorial: Ediciones Dorna

Año de publicación: 2019

Páginas: 114

Sinopsis: Primero, luneció

y Ekachi partió a Xanadú.

Luego, soleció

y K-4mi partió a Xanadú.

Después, niebleó

y Yoru partió a Xanadú.

Al final, tormentó

y Y-0ka partió a Xanadú.

Xanadú es una nostalgia controlable: el mismo viaje, el mismo tren, el mismo desierto tan áspero y tan gris. A veces los detalles se confunden: hay un convoy en vez de un tren, un pantano en lugar de un desierto. Pero el camino nunca llega a cambiar de verdad.

No realmente.

Tengo que confesar que empiezo a escribir esta reseña de la misma forma con la que comencé el libro: de lado y no mirándola directamente a los ojos. ¿El motivo? Expectativas. ¿Y de dónde vienen estas expectativas? Lo primero y más obvio: la sinopsis es tremenda y te atrapa con sólo un par de palabras... y por lo general cuando me pasa eso el libro me suele gustar. Muchísimo. Esto quiere decir que ya entro con bastantes ganas de leerlo. El segundo motivo es que incluso antes de tenerlo entre mis manos ya había empezado a seguir a la autora por Twitter, y os puedo asegurar que tiene un pozo de conocimientos en la cabeza completamente envidiable. En definitiva: me esperaba mucho del libro... y por muy emocionada que estuviera no podía evitar sentirme un poco intimidada, temiéndome una posible decepción. Lo mismo me ocurre con esta reseña, aunque en este caso a los que temo defraudar es a las personas que la lean.

Como ya te deja caer la sinopsis, la historia está dividida en cuatro partes, cada una contada desde el punto de vista de un personaje distinto, todos relacionados entre sí. Una vez dicho esto, me encuentro a mí misma dando vueltas a la mejor forma de explicar el argumento (y por lo tanto la relación entre los personajes). El caso es que no hay realmente un argumento, o al menos no del tipo al que estamos acostumbrados. La historia tiene principio, final y un hilo conductor que los une, sí, pero personalmente creo que eso es secundario. Mientras leía el libro, no podía evitar tener la impresión de que lo importante era lo que pasaba en ese momento. Al igual que en un sueño, muchos de los momentos parecían suceder de forma completamente independiente, como si estuvieran aislados dentro de su burbuja particular. En esas ocasiones yo personalmente casi disfrutaba más de la escena en la que los personajes se encontraban que del argumento en sí. Y gran parte de esto se debe a la forma de la que está escrito. 

En mi cabeza el estilo de este libro está ligado a las escenas-sueño que acabo de mencionar gracias a algo que he definido dentro de mi cabeza como "escritura conceptual". O sea: en vez de utilizar palabras para definir conceptos, se cogen conceptos y se aplican a las palabras. Me explico mejor: ¿os ha pasado alguna vez que queréis decir algo pero la palabra con el significado exacto está en otro idioma y es intraducible? ¿Y os quedáis con esa sensación de que hay algo que no estáis capturando? ¿O cuando estáis dándole vueltas a un concepto y vais saltando de asociación a asociación, todas ellas sin mucha conexión aparente pero que en vuestra cabeza tienen sentido? Pues ahora imaginaos coger todas esas sensaciones inacabadas e intentar simultáneamente describirlas y usarlas para describir otras cosas a su vez. Queriéndolo o no queriéndolo, vais a acabar con la sensación de que todo tiene sentido pero al mismo tiempo no cuadra. Ahora intentad trasladar eso al argumento y entenderéis por qué tengo problemas para describirlo. Por un lado es bastante sencillo definir lo que ocurre de la forma más simple posible: una joven (Ekachi) desaparece tras ser enviada a realizar una entrega a Xanadú. Este viaje afecta las acciones de los otros tres personajes principales, que también acaban abandonando el templo donde vivían. Ahora bien, decir que eso es todo lo que ocurre en el libro es hacer un muy flaco favor a la historia. Primero hay que tener en cuenta el trasfondo, el cual llega poco a poco al lector a través de detalles que van apareciendo en cada historia, como el por qué los androides tienen un pájaro como corazón en el pecho. Luego hay que tener el personaje que estamos siguiendo en ese momento, ya que cada uno tiene un punto de vista y estilo de monólogo interno completamente distintivo. Luego hay que pensar que no todo el mundo sabe todo. Y por último hay que tener en cuenta lo que supone escribir usando este método conceptual que he mencionado: en ocasiones da la impresión de que los personajes mismos no saben qué está pasando, o que simplemente eligen no explicar al lector todos los puntos de su historia, por lo que se forman lagunas en lo que sabemos de sus vidas. En definitiva: esta no es una historia que deba procesarse de una forma normal, sino asumiendo que todo es posible y las cosas no tienen por qué tener sentido o explicación desde tu punto de vista. Hablaría algo de los personajes, pero a parte de mencionar que dos de ellos son humanos y los otros dos androides creo que el resto sería hacer spoiler.

La verdad es que no sé qué más mencionar del libro, dado que personalmente creo que hay que leerlo para comprender cómo es de verdad. O no hacerlo, pero leerlo de todas formas. Sinceramente creo que tanto el estilo en el que está escrito como sus detalles o la forma única que tiene de transmitir cosas son golpes de genialidad que a mí personalmente me encantan y no me cansaría de leer en otras historias. Si tuviese que poner un pero sería que esa sensación de ensoñación que transmite se rompe durante el final debido a una serie de revelaciones sobre lo que ha pasado con los personajes principales. Teniendo en cuenta cómo había transcurrido hasta ese momento la historia yo ya estaba más que preparada (de hecho, disfrutando) con la idea de que la gran mayoría de las cosas que habían pasado a lo largo del libro quedarían como un misterio sin resolver, de cierta forma desafiando al lector para que haga su propio camino a Xanadú. Esa pérdida de misterio en las últimas páginas me acabó produciendo una cierta desilusión, ya que me pareció que rompía con la atmósfera que se había creado a lo largo de la lectura.

Como he mencionado, no quiero entrar en más detalles en esta reseña, así que si queréis saber más id a leer el libro. Baste con decir que me encantó y ojalá encontrar más de este estilo.

Mi calificación: