"Palabras Radiantes", Brandon Sanderson

Título: Palabras Radiantes (#2)

Título original: Words of Radiance

Autor: Brandon Sanderson

Idioma original: inglés

Saga: El Archivo de las Tormentas (The Stormlight Archives)

Editorial: Nova

Año de publicación: 2014

Páginas: 1248

Sinopsis: Los Caballeros Radiantes deben alzarse de nuevo. 

Los antiguos pactos han sido pronunciados, los spren han vuelto. Los hombres buscan aquello que fue perdido. Temo que la lucha les destruya. 

Esta es la naturaleza de la magia. Un alma rota tiene grietas en las que caben otras cosas. Surgebinding, los poderes mismos de la creación. Pueden apoyar a un alma rota, pero también son capaces de ensanchar sus fisuras.

El Windrunner, perdido en una tierra resquebrajada, equilibrado en la frontera entre la venganza y el honor. La Lightweaver, consumiéndose lentamente por su pasado, buscando la mentira en la que se tiene que convertir. El Bondsmith, nacido entre sangre y muerte, luchando por reconstruir lo que fue destruido. La Exploradora, cabalgando entre las vidas de dos gentes, forzada a elegir entre una muerte lenta y una horrible traición a todo lo en lo que cree.

Ha llegado la hora de que despierten, la Everstorm está cerniéndose sobre nosotros.

Y el Asesino ha llegado.

(Nota: No encontraba ninguna sinopsis que me gustase, ya que todas las que había en español eran muy cortas y hablaban más de Sanderson que de la trama en sí, así que he traducido la sinopsis oficial personalmente. Muchos de los términos están en inglés y hay partes que suenan un poco raras, pero espero que se entienda).

¿Recordáis aquél libro de 1216 páginas que recomendé hace tiempo? Pues aquí tenéis su continuación, de 1248. Aquí lo de "lo bueno, si breve, dos veces bueno" no se lleva mucho, no, no. Sanderson, dame todo el contenido que quieras que yo no me voy a quejar.

Lo primero que quiero decir es que hacer reseñas de esta saga siempre me cuesta mucho, principalmente debido a que es una de mis sagas favoritas y con bastante diferencia. De hecho, cualquier persona que me conozca os podría decir que es de lo primero que recomiendo a la gente que quiere leer algo nuevo. La verdad es que sospecho que ya les tengo un poco cansados a los pobres. Pero creedme: la serie lo merece. Lo malo de que me guste tanto es que a la hora de ponerle una puntuación me cuesta muchísimo diferenciar qué tomo está mejor y cuál peor (principalmente porque la cosa acaba siendo un "con este estuve al borde de mi asiento un 95% del tiempo de lectura y con este sólo un 90%). Lo haré lo mejor que pueda:

Como ya he mencionado, Sanderson es de lo mejorcito que hay hoy en día en fantasía, y gran parte de esto viene gracias a su maravillosa creación de mundos mágicos (su worldbuilding, para entendernos). Ya había hablado de su excelente trabajo en la anterior reseña, pero es que es este libro la cantidad de información que nos presenta no hace más que aumentar. Aprovechándose de que ya conocemos los personajes principales, empieza a dedicar capítulos a saltar de un lugar a otro del continente, dejándonos ver atisbos de lo que pasa en otras zonas o cómo perciben sus gentes los eventos que se suceden a lo largo de la saga. Esta decisión de ir desvelando poco a poco el mundo a lo largo de sus novelas me encanta, ya que te da tiempo a hacerte una idea de quién es quién y qué es qué antes de que se vuelvan relevantes, así que cuando por fin hace que el lector centre su atención en esos detalles ya se pueden disfrutar de forma plena. Sin embargo, gracias a la estructura de la serie (cada tomo está dividido es "libros", entre los cuales hay capítulos protagonizados por personajes que no forman parte del elenco principal) aún nos encontramos de bruces con tramas y personajes que no conocíamos hasta el momento y que a veces nos dejan un poco confusos en cuanto a la relevancia de lo que acabamos de leer. Este efecto disminuye un poco en este segundo libro, en el que como ya contamos con más información (además, muchos de esos capítulos están protagonizados por personajes que ya conocíamos) nos podemos ir enterando de lo que pasa exactamente.

Hablando de puntos de vista, en este nuevo tomo damos la bienvenida a un nuevo personaje que tiene una POV principal: Eshonai, líder de los parshendi contra los que llevan todo el primer libro luchando la mayoría de nuestros protas. Sorpresa sorpresa, resulta que la sociedad parshendi es increíblemente más compleja de lo que los Alethi (cultura a la que pertenece la mayoría de los anteriores mencionados protagonistas) sabían o podrían haberse supuesto. Como es natural, Eshonai permite al lector ver cómo se está viviendo el otro lado de la guerra, cuál es el propósito de los parshendi (no olvidemos que fueron ellos los que mandaron asesinar al anterior rey) y sobretodo cómo funciona su cultura. Para que os hagáis una idea, en el primer libro Kaladin se queda flipando cuando descubre que en el ejército de los parshendi luchan tanto hombres como mujeres (básicamente se da cuenta de que unos tienen barba y otros no. Para que veáis el nivel de atención que prestan los Alethi a sus enemigos). En realidad, los parshendi tiene más de dos géneros y pueden adoptar distintas formas físicas, cada una con unas características distintas, pero los Alethi no están preparados para tener esa conversación. (De hecho se enteran de la peor manera posible, lo cual ahora mientras lo estoy escribiendo me parece muy gracioso). En definitiva, la adicción de Eshonai como POV nos permite ahondar aún más en la guerra, los parshendi y sus motivos, algo que está intrínsicamente unido al pasado de ese mucho y... bueno, muchos spoilers en general. Otro personaje nuevo es Lift, una pequeña ladrona y autoproclamada "alucinante" que posee un vínculo con un spren sin saber exactamente lo que es. Gracias al capítulo en el que aparece conocemos otro tipo de Surgebinding, otra cultura... y un personaje que la persigue y que si leéis las cosas con cuidado descubriréis que ya habéis visto antes y que es bastante importante.

Hablando de personajes importantes, hubo uno que eché en falta. Y mucho. Jashna desaparece prácticamente al principio de la novela, y mientras que entiendo que su ausencia era necesaria para desarrollar la historia de Shallan no pude evitar echarla de menos a lo largo de todo el libro. Muchas veces no te das cuenta de lo carismático que es un personaje hasta que no está, y este ha sido uno de esos casos, sobretodo teniendo en cuenta lo que pasó con Shallan. El papel de esa chica en este tono me tiene un poco indecisa. En este libro exploramos su pasado, por lo que los capítulos de flashback están dedicados a su infancia. A mi personalmente leer cómo había sido su vida me encantó, ya que ayudaba mucho a explicar sus traumas, la relación que tiene con su familia y con su spren, Pattern, y cómo se ve ella a sí misma, lo que asienta las bases para unos desarrollos de personaje bestiales que ya se empiezan a entrever en este libro. Sin embargo, su hilo argumental hasta el momento en el que se junta con el resto de personajes me pareció francamente aburrido, sobretodo teniendo en cuenta el arco puramente académico y de wordbuilding al que nos había dejado acostumbrados en el primer libro. Una vez ya se junta con el resto del elenco mejora un poco, pero Sanderson se mantiene fiel a su costumbre de hacer que cada personaje se dedique a explorar una parte distinta de la trama, por lo que aunque tiene interacciones maravillosas con el resto del cast (además Shallan es una chica graciosísima que hizo que me riese a carcajadas en más de una escena), gran parte de su narrativa se me hizo un poco pesada en relación con los sucesos a los que se enfrentaban el resto de los personajes. Importante, pero pesada.

Sobre el resto de los personajes, un breve resumen. Kaladin trabaja para Dalinar, por lo que tiene tiempo para explorar mucho más sus poderes y sobretodo su moral. Se puede decir que ese es el arco de todo lo que hace en el libro: qué es honorable, qué no lo es, sus nuevas obligaciones y dónde está su lealtad. Dalinar continúa con su propósito de unir al resto de los Highprinces en la lucha contra los Parshendi, deseando poder terminar la guerra y con la presión de una fecha límite en el horizonte. De Shallan y Eshonai ya he hablado. Adolin es un encanto (para variar), empezamos a aprender más cosas de Renarin, los miembros del puente cuatro son maravillosos, la vida de Szeth cada vez va a peor, Wit aparece poco pero se le quiere muchísimo y Navani es la jefa que todos conocemos y queremos.

Podría seguir hablando horas y horas de este libro, pero para no aburriros voy a dejar aquí los puntos que más me han gustado y menos me han gustado. Lo que más me ha gustado es poder explorar con más profundidad el wordbuilding y la relación entre los personajes. Se nota que Sanderson ya no tenía la presión del primer libro y podía extenderse más en los personajes de forma individual que en la acción para hacerlo "interesante". También me gustaron mucho los capítulos intermedios, ya que ahora que conozco el trasfondo de todo lo que pasa (no os voy a mentir, me leí spoilers. Algún día os hablaré del Cosmere) se disfrutan muchísimo y te hace mucha ilusión reconocer eventos y saber qué son algunos personajes. Lo que menos me ha gustado ha sido sinceramente la línea argumental de Shallan, que en ocasiones aletargaba la narrativa y había capítulos en los que casi me tenía que forzar a seguir leyendo sin saltarme nada. ¿Eran importantes? Sí. ¿Resultaban aburridos en comparación con el resto? También.

En definitiva, este segundo tomo cae un poco por debajo de su predecesor (todo por culpa de la narrativa de Shallan), pero en lo demás no se queda para nada corto. Varias veces tuve que ponerme de pie y dar un paseo de pura emoción, una vez empezaba a leer no podía soltarlo. Por favor, leed el Archivo de las Tormentas.

Mi calificación: