"Destellos", Jen Wang

Título: Destellos

Título original: Stargazing

Autora: Jen Wang

Idioma original: inglés

Editorial: Sapistri

Año de publicación: 2020

Páginas: 224

Sinopsis: Moon es todo lo que Christine no es: impulsiva, segura y creativa. A pesar de haber crecido en la misma comunidad chino-americana, no pueden ser más distintas, pero en cuanto Moon se muda al lado de su casa ambas se convierten en las mejores amigas, compartiendo su pasión por el K-Pop y pintándose las uñas cuando sus padres no miran. Un día, Moon le cuenta a Christine su secreto mejor guardado: en ocasiones tiene visiones, unos destellos en forma de ángeles que le susurran un mensaje desde las estrellas: la tierra no es realmente el lugar al que pertenece. Sin embargo, las visiones de Moon tienen un origen más terrenal de lo que cabría pensar, y de repente es ingresada en el hospital para una intervención quirúrgica de urgencia. ¿Podrá realmente ser Christine la amiga que Moon necesita ahora que todo se viene abajo? Jen Wang viaja a la infancia para crear una entrañable historia de amistad verdadera, una amistad que supera todas las dificultades imaginables y se convierte en pura emoción y esperanza.

Christine es una niña tímida procedente de una familia chinoamericana que busca su hueco en el mundo, especialmente en el instituto. Pertenece a una comunidad muy cerrada que gira en torno a sus creencias religiosas y sus padres son bastante estrictos con ella, ya que esperan que sea una chica ejemplar, tanto en los estudios como en general, haciendo que su vida esté bastante pautada y convirtiéndola en una chica muy responsable. Moon, por su parte, es una chica nueva que acaba de llegar al barrio junto con su madre y que se mudará justo enfrente de la familia de Christine. Ambas están solas y apenas pueden llegar a final de mes desde que murió el padre de Moon, por lo que los padres de Christine, que conocen su caso, deciden ayudarlas alquilándoles el anexo de su casa por un precio simbólico. Moon tiene una reputación un tanto mala y los alumnos del instituto dicen de ella que es bastante violenta, dura y que no termina de encajar con los demás. Ha llevado una vida difícil y perder a su padre, tener que mudarse y ser consciente de la escasez económica que sufren ha influido mucho en su forma de comportarse. Christine y ella se conocerán cuando sean vecinas y pese a sus prejuicios iniciales (principalmente por parte de Christine dado que Moon es todo lo que sus padres no quieren para su hija) pronto se harán buenas amigas, aunque no podrían ser más distintas. Cuando Moon y Christine forjen una mayor confianza, Moon le confesará que tiene visiones de seres celestiales, ángeles como ella les llama. Sin embargo, estas visiones pronto se revelarán como algo más que las fantasías de una adolescente, algo mucho más preocupante que pondrá aprueba la amistad de las chicas y la fortaleza de los lazos que han establecido.

Conocí a Jen Wang gracias a su novela gráfica de El príncipe y la modista y me enamoró tanto con la historia como con el dibujo, por lo que en seguida busqué más de esta autora y topé con Destellos. El enfoque de ambas novelas es completamente diferente, pero los dos puntos que tienen en común son la exploración de la amistad (tanto los momentos buenos como los no tan buenos) como la diversidad de sus personajes, dándole la voz y el protagonismo a quienes no suelen tenerlo.

A través de una historia para todos los públicos y protagonizada por dos niñas en el borde de la adolescencia, la autora nos habla de lo complicado que es ser inmigrante en países donde no todo el mundo comprende tu situación y te juzgan desde la ignorancia, lo difícil que es dar ese paso hacia la adolescencia, la presión de los padres por darle a sus hijos todo lo que ellos no tuvieron ignorando sus deseos, el esfuerzo por encajar en tu entorno y en el instituto, un microcosmos que muchas veces puede ser devastador, y una serie de temas que, por más tiempo que pase, siempre estarán de actualidad. A través de los ojos de Christine veremos cómo se esfuerza y sacrifica para ser aquello que sus padres desean y cómo su camino en línea recta será interrumpido por la impulsiva y enérgica Moon, que le dará a su día a día el entusiasmo que le faltaba, descubriéndole un amplio mundo de posibilidades y de diversión. A pesar de sus reticencias iniciales por todos los rumores que circulan acerca de Moon y de su comportamiento, al tenerla de vecina Christine podrá conocerla mejor y será capaz de ver más allá de su opinión preestablecida, encontrando en ella a una amiga que la complemente a la perfección. Moon es una apasionada del k-pop, del baile y de la música en general, pasión que le transmitirá a Christine y de la cuál ella también empezará a disfrutar, haciendo que los padres de esta no vean su amistad con buenos ojos ya que creen que su hija se está desviando del camino que con tanto esfuerzo le han pautado. Es una amistad muy bonita porque se aportan cosas mutuamente y sus mundos, completamente opuestos, se retroalimentan dándose la una a la otra lo que les "faltaba" en sus respectivas vidas.

El punto amargo de esta historia lo pone la verdad sobre las visiones de Moon. La realidad da paso a una historia que roza el realismo mágico en la que Moon cree fervientemente en que unos seres exteriores cuidan de ella. Cuando se descubra que esto se debe a una enfermedad, la relación entre ambas niñas se dificultará y pasará por numerosos baches que hará que Christine se replanteé seriamente su amistad con Moon y si su influencia es buena para ella.

Es una historia muy tierna que se acompaña de unas ilustraciones muy dulces y coloridas que siguen el estilo del resto de novelas gráficas de la autora. Aunque el tema principal es la amistad, como ya he comentado Jen Wang aborda otros temas como el ser inmigrante y cómo las familias se adaptan al nuevo entorno mientras intentan mantener sus costumbres, también la diferencia de clases (Christine es de clase media, mientras que Moon es de clase baja) o las expectativas que ponen los padres sobre sus hijos porque esperan poder darles la mejor vida posible, sin ser muchas veces conscientes de la presión que eso les supone.

Destellos demuestra que una narración a priori simple que habla del surgimiento de la amistad entre dos niñas puede tener de fondo temas muy interesantes y actuales que es necesario poner sobre la mesa, y más si vienen de parte de una autora que sabe de lo que habla, ya que esta historia tiene elementos autobiográficos. Si todavía no conocéis la obra de Jen Wang, os animo a darle una oportunidad porque estoy segura de que su estilo de ilustración y lo que cuenta con él os llegará al corazón.