Owari no Seraph

Título: Owari no Seraph / Seraph of the End (El serafín del final)

Escrito por: Takaya Kagami

Ilustrado por: Yamato Yamamoto

Género: shonen, vampiros, drama, sobrenatural

Editorial: Shueisha. Licenciado por Norma Editorial (primera publicación para el Salón del Manga de Barcelona 2016)

Año de publicación: 2012 (Japón) 2016 (Previsto en España)

Tomos: 10. En curso

Sinopsis: La historia tiene lugar en un mundo donde un virus ha asolado a toda la humanidad a excepción de los niños, que fueron esclavizados por vampiros. El protagonista es Yuichiro Hyakuya, un esclavo humano que sueña con hacerse lo suficientemente fuerte como para matar a todos los vampiros.

Adoro esta serie y no pude resistirme a reseñarlo. Aunque primero me vi el anime, me enganché tantísimo que enseguida busqué el manga. Actualmente, el anime va por la segunda temporada y como he puesto en la ficha técnica, Norma Editorial anunció que comenzaría su publicación en 2016, siendo una de las novedades a presentar en el Salón del Manga de Barcelona. ¡Qué ganas!

Yuu fue despreciado por sus padres de niño, por lo que acabó en el orfanato Hyakuya. Allí conoció a Mikaela, el cual se convertiría (junto al resto de niños) en su nueva familia y, posteriormente, en su mejor amigo. Sin embargo, ese mismo día un virus mortal asola la humanidad, matando a los adultos. Solo los menores de 13 años quedan con vida. Yuu y Mika escapan de allí, más son atrapados por los vampiros (instigadores del virus) y recluidos en Sanguinem, su ciudad. Los vampiros están recolectando a los pequeños como si fueran ganado para alimentarse de su sangre. Desde ese momento, Yuu sueña con escapar y derrotar a los malditos chupasangres que se aprovechan de ellos. Con la ayuda inestimable de Mika, elaboran un plan que les permita salir a la superficie. A pesar de que la mayoría de la humanidad se ha extinguido y fuera tan solo queda el virus, al tener la edad límite para que les afecte creen que tendrán una oportunidad.

No lo tendrán tan fácil. Cuando saborean la libertad y casi la pueden tocar con las manos, aparece Ferid Bathory, un noble que aniquila de un golpe a la familia de Yuu, dejando que solo él pueda marcharse a la anhelada liberación. Nada más salir, tropezará con Guren Ichinose, un teniente coronel perteneciente a una organización militar, el Ejército Imperial Japonés, a cargo de la aniquilación de los vampiros. Los humanos no se han extinguido y aun les queda fuerza para pelear. Yuu pedirá unirse a ellos y combatir a su lado. No piensa permitir que las fechorías de los vampiros y el asesinato de su familia queden impunes.

Respecto a este manga, como en todo en realidad, te puedes encontrar amantes o detractores. Por suerte, me encuentro en el primer grupo. Puede que parta de un argumento sencillo, trillado, con unos personajes cuyas personalidades hemos visto mil y una veces. No lo voy a negar. Lo que, para mí, hace este manga especial es la intensa carga emocional que lo acompaña, los giros de trama, la acción, la intriga y el suspense. Si te encariñas con los personajes (como sin duda me ha ocurrido a mi), te garantizo que sufrirás si no en cada capítulo, casi.

Tiene fallos de trama (hasta donde yo sé, es imposible que un vampiro se sonroje), momentos en los que suceden cosas y no sabes por qué, personajes que en un minuto te resultan insoportables y al siguiente adoras etc. Es decir, tiene errores. No es el mejor manga del mundo y la adaptación al anime más de lo mismo. No puedo decir lo contrario porque estaría mintiendo. Pero una vez te metes de lleno en él, tiene algo que atrapa, que te deja con ganas de saber más, del qué pasará.

El diseño de los personajes y los escenarios, los dibujos, el detallismo, todo ello es maravilloso. Las ciudades destruidas, el territorio de los vampiros... los lugares están muy logrados, plagado de pequeños detalles que los hacen únicos y rebosantes de personalidad propia. Esto se marca mucho más en el anime, pero también se aprecia el esfuerzo en el manga.

La trama da constantes giros, hasta el punto en que no sabes quiénes son los buenos y quiénes los malos. Tanto Yuu como el escuadrón al que pertenecerá, irán de un lado a otro, acatando las órdenes de sus superiores a la par que descubren los trapos sucios que el Ejército Imperial/Demoniaco Japonés se trae entre manos. ¿Qué se esconde tras las poderosas armas enlazadas con demonios que usan para combatir? ¿Qué es el serafín del final? ¿De verdad son los vampiros tan malos como los pintan?

No quiero terminar la reseña sin mencionar la polémica que estos últimos meses ha sobrevolado Owari no Seraph. Desde hace un tiempo, algunos sitios web la han catalogado como shonen ai, entre ellos Wikipedia El término shonen ai se refiere a una relación profunda y cariñosa entre dos personajes masculinos, aunque no implica besos ni nada así. Y es que la amistad que mantienen Mika y Yuu, que se consideran así mismo familia, es tan estrecha y fuerte que algunos fans han querido ver un sentimiento de amor entre ellos, a pesar de que no se ha manifestando un vínculo amoroso en el manga. No obstante, algunas teorías creen que Mika está enamorado de Yuu, analizando sus gestos, sus frases hacia él y otras cosas que no diré para que no sea spoiler. Independientemente de las teorías y de que estas sean ciertas o no, Owari no Seraph NO es shonen ai, es shonen a secas. Sí, yo también shippeo el MikaYuu y también creo que Mika en el fondo siente algo muy fuerte por Yuu, no sé si tal vez amor pero un sentimiento equivalente. Más si su autor lo ha calificado como shonen, los fans no tenemos derecho a darle otra etiqueta. A menos que según avance el manga, este hecho se confirme. Por tanto, si no os gusta la relación chico x chico, no os preocupéis, no hay nada parecido en Owari.


¿Debería leerlo?

Como ya he dicho, hay gente a la que no le ha gustado nada el manga o que lo considera simplemente entretenido. En mi opinión, tiene errores pero aun así, me está encantando y lo estoy disfrutando muchísimo. Todas mis reseñas son subjetivas, pero en este caso lo es especialmente. Así que a pesar de los fallos, esta es mi nota.