"Los saqueadores de sueños", Maggie Stiefvater

Título: Los saqueadores de sueños (#2)

Título original: The Dream Thieves

Autora: Maggie Stiefvater

Saga: The Raven Boys

Idioma original: inglés

Editorial: SM

Año de publicación: 2014

Páginas: 496

Sinopsis: Todo el mundo tiene secretos. Los guardamos o nos los guardan, los controlamos o escapan a nuestro control. Ronan Lynch también. El gran secreto de Ronan es que puede coger cosas de los sueños y traerlas al mundo real. Lo malo es que hay alguien más que desea esas mismas cosas. Alguien cuyas intenciones son más siniestras. Y mientras tanto, las líneas ley que rodean Cabeswater se están debilitando. Glendower es un sueño cada vez más lejano, y Gansey no está dispuesto a permanecer indiferente.

CONTIENE SPOILERS DE LA PROFECÍA DEL CUERVO

Blue ha crecido rodeada de las mujeres de su familia, todas ellas con capacidades psíquicas y adivinatorias, las cuales han profetizado su destino: Blue matará a su amor verdadero solo con un beso. Esto ha hecho que no haya vivido una adolescencia normal y se haya esforzado al máximo para no dejar que ningún chico entrara en su círculo. Todo cambiará cuando un día conozca a Gansey y su grupo, niños pijos que acuden a la prestigiosa y elitista academia Aglionby. Sin embargo, no son lo que parecen y cada uno de ellos tiene sus peculiaridades. El líder de estos amigos, Gansey, está obsesionado con encontrar al rey galés Glendower cuyo cadáver, según dice la leyenda, está enterrado en una línea ley, una zona de mucho poder mágico, y aquel que lo encuentre recibirá un deseo. Gansey vive por y para hallar a Glendower y sus amigos, Adam, Ronan y Noah, le ayudan en su búsqueda. En el primer libro se nos presenta a sus protagonistas, sus peculiaridades, cómo Blue termina involucrada con los chicos y cómo los cinco juntos se embarcan en la aventura de detectar la línea ley y encontrar a Glendower.

En este segundo libro, esa búsqueda continúa, más emocionante que nunca, después de haber entrado en Cabeswater, un bosque mágico y misterioso que surge de la línea ley que cruza Henrietta, el pueblo en el que se desarrolla la historia. Además del increíble descubrimiento, la tía de Blue, Neeve, desapareció misteriosamente, así como un profesor de la academia Aglionby, que en su momento también estuvo interesado en la leyenda del rey galés.

En Los saqueadores de sueños el lector va adentrándose poco a poco en este grupo tan peculiar que encabeza la búsqueda de Glendower y vamos descubriendo sus peculiaridades. La trama se centra sobre todo en Ronan Lynch, el que podríamos decir que es el macarra del equipo, con una familia adinerada pero desestructurada debido al extraño asesinato de su padre y las relaciones complicadas que mantiene con sus hermanos. A pesar de su fachada de tipo duro, tiene un corazón de oro y se preocupa mucho por sus amigos por más que no lo demuestre a priori. Aquí vemos su faceta más vulnerable, sus miedos y el despertar de sus extrañas capacidades, que serán fundamentales en varios momentos de la historia. Gansey es su mejor amigo y no ha sufrido una gran evolución desde el primer libro. Aun así, puedo decir que junto a Noah es mi personaje masculino favorito. Pese a su fortuna y tener una familia más bien snob, es un chico modesto, consciente de que no todo el mundo es tan afortunado como él y que tampoco todo el mundo puede permitirse invertir tanto tiempo y dinero en perseguir una leyenda como Glendower. Es el pegamento del grupo, el que actúa un poco como madre y se encarga de suavizar las cosas cuando hay discusiones o desavenencias. Lo que más destaca de él es la minuciosidad con la que investiga todo lo relacionado con el rey galés, pues a pesar de estar persiguiendo una leyenda, se lo toma muy en serio, contagiando su entusiasmo a todo aquel que lo rodea. Blue es la única chica y quien inició como protagonista de la tetralogía, aunque después el protagonismo fue variando entre los diferentes personajes principales. Blue lleva toda su vida rodeada de mujeres increíbles con dones mágicos muy útiles, mientras que su única función es actuar de catalizador para su familia y que los poderes de esta tengan más fuerza. Por un lado, le encantaría ser una chica normal con una familia normal, pero por otro a veces se siente poca cosa e inútil debido a que sus capacidades no parecen realmente valiosas. En esta novela pasa a un segundo plano, pero vemos cómo se afianza su fe ciega en los chicos, convirtiéndose en una más del grupo y volcándose de lleno en la búsqueda del rey. Mantiene una especie de relación con Adam, aunque se ve claramente que para Blue es más bien un amigo, así que tampoco tengo muy claro el por qué de dicho romance unidireccional. En cuanto a Adam, es quien está más fuera de lugar de este variopinto grupo. Se siente inferior a sus compañeros porque él está en la academia gracias a una beca de estudios, dado que procede de una familia pobre y tiene que trabajar como mecánico para cubrir sus gastos. A raíz de encontrar Cabeswater, Adam interrumpió sin querer una especie de ritual mágico que está provocando ciertos cambios en él que no sabe muy bien cómo explicar. De los cuatro personajes masculinos principales, es el que menos me interesa, ya que no he conseguido conectar con él y su personalidad parece basarse en ser pobre y, por tanto, tener menos opciones en la vida. Me gusta que la autora hable de estos temas y evidencia que la vida es más fácil cuanto más dinero tienes, pero me da la sensación de que en el caso de Adam esa es toda su personalidad. Es verdad que también experimenta una gran evolución en esta novela, así que tengo ganas de saber qué nos deparará su presencia en el siguiente libro. Cerramos el elenco con Noah, sin duda el más peculiar, ya que en el libro anterior descubrimos que, en realidad, está muerto y el Noah que conocen nuestros protagonistas es una aparición alimentada por la magia de las líneas ley de Henrietta. Aunque no tiene demasiadas escenas, me gusta mucho la relación tan estrecha que se establece entre él y Blue y es un personaje muy real, muy tierno y que también aporta mucho al grupo, independientemente de su estado.

Como ya he comentado, Ronan roba todo el protagonismo en Los saqueadores de sueños y Kavinsky podría considerarse su némesis. También asiste a la academia Aglionby y su día a día está marcado por el alcohol, las carreras de coches y el hacer lo que le dé la gana sin ningún tipo de consecuencia. Si bien es un macarra y a todas luces una mala compañía, carece de ese buen corazón y compañerismo que caracteriza a Ronan. Sin embargo, ambos llegarán a un acuerdo tácito, pues muy a su pesar tienen en común un secreto que nadie más puede conocer, por lo que solo se tendrán de apoyo el uno al otro en este sentido. El secreto y los trapicheos entre Ronan y Kavinsky serán el nudo principal, mientras que la búsqueda de Glendower pasará a un segundo plano. Otro personaje nuevo que adquiera gran relevancia es el Hombre de Gris. No sabemos su verdadero nombre, al margen del apelativo que se da a sí mismo, pero sí que es un sicario que ha sido contratado para encontrar un objeto mágico denominado Grenwarren, cuyo poder consiste en que aquel que lo posea podrá sacar cosas de sus sueños. Sus pesquisas le llevarán a la casa de Blue y a los chicos cuervo.

Los saqueadores de sueños me ha gustado un poco menos que el primer libro. La trama avanza bastante lento y, aunque lo mismo sucedía con el anterior, la primera parte me resultaba lo suficientemente atrayente y mágica como para que esto no me importara. Sé que hay muchos lectores fans de Ronan, pero puedo asegurar que no es mi caso. No es que me desagrade ni mucho menos, pero su historia no termina de interesarme, por lo que tenerle de protagonista no fue un aliciente. Además, lo que más me gustaba era la búsqueda de Glendower y toda la magia que existe a su alrededor, que queda un poco opacada por la trama particular de Ronan. Aun así, la segunda mitad del libro despega y la acción se vuelve más trepidante conforme nos vamos enterando de más cosas relacionadas con nuestros cuervos. La pluma de la autora es bastante peculiar porque es muy onírica y en ocasiones surrealista, un estilo que encaja a la perfección con la tetralogía pero en la que cuesta adentrarse desde el principio porque puede resultar demasiado artificiosa. Se nota, sobre todo, en los diálogos, ya que muchas veces son irreales y poco naturales, por lo que tienes que hacer un esfuerzo por recordar que está así hecho a propósito para darle más halo de misticismo. Creo que la historia que está tratando de contarnos no funcionaría de la misma manera si el estilo fuera diferente, ya que Stiefvater intenta imprimir con sus palabras que la magia está en todas partes, incluso a nuestro alrededor, viva y palpitante aunque no seamos inconsciente de ello. Leer The Raven Boys es como adentrarse en un sueño, aunque al principio pueda costar un poco acostumbrarse a ello.

Los saqueadores de sueños sigue la intrigante línea mágica de La profecía del cuervo. No es una novela tan introductoria, por lo que conocemos más y mejor a los personajes, aparecen algunos nuevos que le darán interés a la historia y la trama se va complicando poco a poco, acercándonos cada vez más a la verdad tras la tumba de Glendower y a las infinitas posibilidades de la magia.