Yume Nikki by Patofan

Título: Yume Nikki (Dream Diary)

Desarrollador: Kikiyama

Año de publicación: 2004

Género: Horror psicológico, exploración, artístico.

Plataformas: PC

Precio a la fecha de reseña: Gratuito (disponible aquí)

¿Disponible en español?: No (inglés o japonés)

En nuestra reseña de hoy vamos a hablar de Yume Nikki, uno de los juegos más raros que podemos echarnos en cara y creado por Kikiyama. Antes de empezar la reseña, debo aclarar que este juego no tiene ninguna relación con Mirai Nikki.

Lo siento Yuno, pero esta no es tu reseña

La trama de este juego es simple: una muchacha (llamada Madotsuki) explora el mundo de sus sueños para recoger efectos (objetos que cambian su aspecto). Planteado así parece tener una trama agradable y amena… de no ser porque sus sueños son más perturbadores que ver una película del hijo bastardo de Tim Burton y Stanley Kubrick mientras estás colocado con LSD. Pero, a fin de cuentas, ese es el principal atractivo de éste juego, así que empecemos su reseña.

DISEÑO Y GRÁFICOS

Los gráficos de este juego… bueno. A su favor juega el hecho de que el juego es de 2004 (tiene ya sus diez añitos), pero aun así se nota que los gráficos de los humanos (sobre todos los de Madotsuki) están basados en juegos de RPG de la época (a fin de cuentas el juego está hecho con GameMaker, programa muy usado para RPGs).

Sin embargo, esto no empaña el hecho de que el diseño artístico cumple perfectamente su objetivo: dar mal rollo. Ya estés deambulando por un inhóspito pasillo con el suelo cubierto de números, un centro comercial abandonado, una colorida sala llena de personas de neón o unas alcantarillas, siempre vas a tener esa sensación de soledad y de que algo no cuadra.

¿Fondos tribales y piernas que andan solas? Totalmente normal

Eso en las salas que no tienen algún evento. Los eventos en este juego generalmente son acciones especiales que ocupan toda la pantalla, y varían de cosas inofensivas como figuras aztecas bailando al ritmo de música rave a… bueno, creo que este vídeo lo deja bastante claro (Nota: el video contiene colores brillantes parpadeando, que pueden resultar perjudiciales para epilépticos)

Resumiendo los eventos de ese vídeo: Madotsuki atraviesa una pared con un cuchillo (la cual se cubre de sangre y grita) para pasar a una escalera en la que hay un ser fálico de colorines frotando una barandilla, tras el cual hay una puerta que atraviesas para ver una… cosa perturbadora cambiando rápidamente de colores mientras hay un ruido perturbador de fondo que se va haciendo más fuerte hasta que se despierta. Todo en cuestión de dos minutos. Y todo perturbador. Estas son las maravillas que te aguardan en Yume Nikki.

MÚSICA Y SONIDO

La música en los juegos de miedo es uno de los aspectos más importantes para crear ambiente, así que Yume Nikki no podía ser menos. Las canciones de este juego generalmente son loops cortos (de cómo mucho 15 segundos) repetidos continuamente. Estos loops varían de melodías simples (como la del video) a ruidos ambientales, pasando por gritos, melodías chiptune o incluso silencio.

La canción es agradable. Lo que te puedes encontrar...

ya no tanto.

Respecto a los sonidos, cumplen. Tienes una variedad de ruidos de caminar (lo que más vas a hacer), gritos, sonidos para los efectos… todo se junta para crear ese ambiente de tensión.

JUGABILIDAD

La parte principal de los juegos, pero no la parte en la que destaca Yume Nikki: la jugabilidad.

La premisa es sencilla: tu objetivo es encontrar los 24 efectos. Para ello, tienes que soñar y explorar los mundos perturbadores, para ir encontrando los efectos. Y poco más vas a hacer: el juego consiste solamente en explorar los mundos, observar las cosas traumatizantes que nos ofrecen y encontrar los efectos, que a su vez usaremos para poder explorar más cosas y encontrar más cosas. No hay casi enemigos, no puedes morir y si te quedas atascado puedes despertar del sueño pellizcándote. Pero esa simpleza no es algo que haga a Yume Nikki un juego peor.

Porque realmente, la gracia de Yume Nikki no es acabar el juego cuanto antes. La gracia está en explorar los mundos y usar los efectos para ver todas las cosas perturbadoras que podemos encontrar. Por ejemplo, Madotsuki puede usar el efecto Severed Head (cabeza cortada), que la convierte en una cabeza que bota por el suelo (algo completamente imprevisible teniendo en cuenta el nombre). Como la cabeza es más pequeña, podrá usar el efecto en otra parte del juego para colarse por debajo de un armario, donde podrá ver… a Madotsuki durmiendo. No tiene el más mínimo sentido, pero a fin de cuentas es un sueño. 

Unos de los… ¿simpáticos personajes? que puedes encontrarte en tus sueños.

O por ejemplo, puede usar el efecto Frog (rana), que la convierte en rana o el efecto Bicycle (bicicleta) que la monta en bicicleta (no sé cómo esperan que alguien se aclare con nombres tan confusos en los efectos), para cruzar rápidamente un mar y entrar en la casa donde conoceremos a nuestro amigo Uboa, posiblemente uno de los personajes más famosos del juego.

Es uno de los personajes más icónicos aparte de por el hecho de ser una cara perturbadora flotando, por su naturaleza aleatoria y sin sentido. Cada vez que entras a la casa y apagas las luces, hay una mínima posibilidad de que la muchacha se transforme en Uboa, te encierre en el cuarto y te transporte a un lugar desolado, cubierto de líquido blanco y con seres extraños en el fondo. Todo al más puro estilo Yume Nikki. ¿Tu única posibilidad para salir de ahí? Despertarte y empezar el sueño de nuevo.

¿Quién no ha soñado con algo así? A mí me pasa todos los días.

Podría detallar muchos más eventos así, pero entonces quitaría toda la sorpresa a las cosas que vais a presenciar. Una cosa que sí voy a decir es que pese a ser un juego simple, no es nada fácil de acabarlo. Hay unos cuatro de los veinticuatro efectos que están en sitios o bien completamente remotos o que dependen completamente del azar para que puedas llegar, lo que hace que puedas necesitar una guía para poder acabar el juego. Porque aunque toda la gracia del juego este en explorar, el final tiene mérito en sí mismo, y es algo que quiero que descubráis vosotros mismos.

¿DEBERÍA JUGARLO?

Es un juego gratis, así que la respuesta es fácil: sí, deberías jugarlo. Puede que sea un juego de miedo (género que puede no resultar atractivo a bastante gente), pero no recurre a gritos de la nada o caras desfiguradas para asustarte, se basa solo en el ambiente y en el surrealismo.

Además, otra de sus grandes bazas es lo abierto que es, tanto el juego como el significado. Puedes completar el juego en el orden que quieras y explorarlo como te apetezca. Pero además, debido a ser sueños y a que no se explica absolutamente nada, ha hecho que brote una gran comunidad de fans que ofrecen una enorme cantidad de teorías sobre el significado de los sueños y la trama (la mayoría de las teorías se encuentran recopiladas en este link) (Nota: la página esta en ingles y contiene spoilers sobre el final del juego).

¿Producto de abusos cuando era pequeña o de una alocada tarde de bailar la Macarena? Nunca lo sabremos.

Y así es como concluye nuestra reseña de Yume Nikki. Espero que haya sido de vuestro agrado. Cualquier duda o comentario lo podéis realizar en los comentarios (se me ha pegado la obviedad de los efectos).